EL SASTRE

Pasaba muchos días en casa de mis abuelos maternos a los que nunca les llamé así, me refería a ellos como el Yayo y la Yaya.

Durante muchos años vivieron en la calle Muntaner, en donde me conocían en todos los comercios y establecimientos del barrio. A mí Yayo le gustaba pasearse conmigo y enseñarme los secretos mejor guardados. La ruta era siempre la misma. Calle arriba para ir a la panadería en donde siempre me premiaban con el bastón de pan, que bajaba mordisqueando calle abajo con los dientes de leche que aún tenía. Después saludábamos al camarero del bar de al lado, que servía los desayunos a una velocidad pasmosa y en donde los vecinos compartían sus buenos días con un par de cafés con leche y algún que otro cruasán.

La farmacéutica venía después, ¡buenos días señor Alejandro! ¡buenos días Susanita, que vestido más bonito llevas hoy! y yo añadía, sí de mariposas rosas.

Pero en donde más me gustaba pararme era en la sastrería. Recuerdo que en el escaparate había tres maniquís. Cada uno de ellos llevaba un traje hecho a medida. Justo al lado había una puertecita que al abrirla, descubría unas escaleras que te llevaban a aquel mundo de agujas y bobinas de hilo. Mi abuelo se sentaba en una silla y entablaba conversación con su amigo el Sastre. Yo me quedaba en el último peldaño mirando como él cosia y confeccionaba aquellas prendas de ropa. Me encantaba observar como pespunteaba los bajos de los pantalones y de las chaquetas. El metro de costura lo llevaba alrededor del cuello, las tijeras en la mano y el alfiletero en la muñeca. A la izquierda había una barra llena de perchas en la que colgaba los trajes que ya había cosido, ajustado o modificado. Aquel pequeño taller era para quedarse y recrearse mirándolo durante horas.

Después de un rato mi Yayo se levantaba de aquella silla de madera y nos despedíamos con un ¡bueno Sastre hasta mañana, a la misma hora!, yo me iba tan contenta y al llegar a casa le contaba a mi Yaya todo lo que había visto y hecho durante aquella mañana.

Photo by cottonbro on Pexels.com

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